Todavia tienes una anecdota dentro de un cine porno? Aun existen en tu ciudad? Pues dale una mirada a esta pagina y te daras cuenta que no eres el unico. Si tienes alguna experiencia que contar .... estamos ansiosos de conocerla.

jueves, 15 de julio de 2010

TRIO EN TAURO



El fin de semana pasado, aproximadamente a las 7 de la noche, me decid� soltar toda mi arrechura y me dirig� al Cine Tauro para hacerlo; basandome en el �ltimo encuentro que tuve ahi me pareci� el lugar ideal para descargar toda la leche que ten�a guardada de todos esos d�as estresantes de trabajo. Como cada vez que ingreso, me acerqu� r�pidamente al ingreso y le pagu� exacto al boletero, de tal forma que no tendr�a que esperar y pasar el problema de ser visto (pues tengo una pareja que no le gusta que yo entre ahi). Mientras ingresaba, vi a un chico de contextura gruesa, trigue�o, rapado, con un polo blanco cuello V y un short rojo que mostraban unas piernas gruesas, duras y velludas y una carita rendona, con una barba candado muy bien cuidada... se acercaba hacia el local, mi mirada capt� r�pidamente esa mata de vellos que sal�a del cuello de su polo. Nuestas miradas se cruzaron y le sonre� mientras yo hacia mi ingreso, el respondi� con una sonrisa p�cara y pag� r�pidamente su entrada. Yo hice un poco de tiempo y subimos juntos al segundo nivel.
Ya adentro, ingresamos por el lado derecho de la sala, mi vista demor� en acostumbrarse a la oscuridad del lugar. Decid� ir al balc�n de la sala, haciendole una se�a con la mirada a este osito para que me siguiera pues solo pod�a imaginar como ser�a ese cuerpote debajo de la ropa. Me sent� en la primera fila, justo frente al balc�n y mir� de reojo cerca de mi, hab�an dos personas m�s, uno estaba bien enterrado en la entrepierna del otro dandole lo que parec�a ser una magistral mamada. Mi oso se acerc� por detr�s de mi y me cruz� para poder sentarse cerca de mi, al hacer esto su bulto roz� siavemente mi brazo, y pude sentir que estaba completamente duro. Se sent� a mi lado y sin dejar pasar mucho tiempo, se la sac� para iniciar su sesi�n de masturbaci�n mientras me ve�a de reojo, fingiendo que ve�a la pel�cula. Ahi pude ver su delicioso falo, 16cm aproximadamente, pero gruesa, era suficiente para satisfacer mi apetito en ese momento. El me sonri� cuando ya estaba completamente armado y me hizo la "se�al" con los ojos para que yo empezara mi trabajo.
Sin pensarlo demasiado me lance sober ese falo que ya empezaba a mojarse. Me lo lleve completamente hasta el fondo de la garganta, lo que hizo que este gran oso liberara un gru�ido de placer que solo logr� ponerme m�s arrecho. Empec� a chuparle toda la verga, desde la punta hasta la base, jugu� con sus bolas, relamiendolas una y otra vez y mientras lo hac�a lo masturbaba para que no perdiera el ritmo, el solo atinaba a gemir y gru�ir susurrando por ratos "Que rico la chupas amor, asi comete toda tu carne, es tuya, sacame hasta la �ltima gota". Se la segu� chupando a tal punto que perd� la noci�n del lugar y cuando volv� en mi, y levant� la cabeza pude ver que un tipo delgado estaba besando a mi oso. Usualmente eso har�a que yo me retirara pero era tal mi excitaci�n que solo atin� a levantarle el polo y liberar toda esa mata de pelos que corria en todo su estomago hasta su pecho y comence a chuparle una de las tetillas, jugueteando con mi lengua haciendo c�rculos mientars lo segu�a masturbando. El empez� a gemir con mas ganas y me cogi� fuerte contra su cuerpo, no queria que dejara de chupar ese pecho velludo. El flaco que se habia incorporado al ver esto, intento bajar para chuparle la verga, pero en ese momento yo baj� tambi�n y ambos empezamos a comernos esos 16cm, el la chupaba, y yo la lam�a. Por momentos nuestros labios se juntaban y nos enredabamos en un beso donde el protagonista principal era ese falo delicioso.
Mientras nosotros estabamos en guerra por la atenci�n de ese trozo de carne, no logramos oir los gru�idos del oso que estaba entre nosotros, cuando solo dijo "Ya no aguanto... la voy a dar". Ambos bajamos y nos concentramos en sus huevos, chupandolos mientras ve�amos los chorros de leche dispararse y recorrer todo el pecho mientras el daba espasos continuos y gru�ia incesantemente de placer.
Tanto el flaco como yo nos retiramos lentamente, como marcando terrotorio, cada quien tocando al oso por su lado. El nos mir� y bes� a uno y luego al otro y nos pidi� un poco de tiempo para recuperarse.
Pasaron unos minutos y el oso nuevamente estaba listo para la acci�n. Me mir� y me dijo "Te quiero cachar" y mientras dijo esto meti� su mano por debajo de mi polo y lo levanto lo suficiente para poder mostrar mi pecho blanco lechoso, con mis pezones rosados. R�pidamente el empez� a chupar mis tetillas, succionando una y otra vez... eso es lo que m�s me puede arrechar a mi en todo el mundo. sin siquiera pensarlo me baj� el pantal�n y la truza. El flaco que estaba ahi le dec�a "cachame a mi macho" pero yo ya lo ten�a ganado. Me puse en 4 agarrandome del asiento y antes de metermela, empez� a lamerme el ano y que rico movia esa lengua. Su barba me hac�a cosquillas pero mi ano se dilat� muy r�pidamente. Cuando se dio cuenta que estaba listo, se puso un jebe que le di y sin darme tiempo para prepararme m�s me la clavo toditita, de golpe. Yo sab�a que no pod�a gritar, pero que rico se sinti� eso. Mientras el hac�a esto yo me masturbaba sin parar. El flaco que ya hab�a dado la batalla por perdida tuvo un momento inteligente y se puso en mi silla y empez� a chuparme la verga. Luego de un rato de estar sintiendo los huevos de mi oso golpear contra mis nalgas y ese movimiento hacerme clavarle la verga en el fondo de la garganta al flaco, mi oso la saco y ba�o de leche toda mi espalda y yo a su vez lo hice sobre la cara del flaco mamador. En ese momento el oso atin� para subir las escaleras e ir al ba�o, yo me limpi� la espalda y arregl� la ropa. Un rato despu�s el oso volvi� y me agradeci� por todo por lo que yo le dije que el agradecido era yo y me dio su n�mero para llamarlo. Esta vez quiero encontrarme con el en un telo, y hacer mucho m�s de lo que hemos hecho hasta ahora.